Lole, o cómo Sole Muñoz le dio materia (reciclada) a su curioso espíritu crafter

 

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¡Muy bien día a todos! Bueno de verdad, especialmente con el planeta, y se lo debemos a Sole de Lole…

 

 

La primera declaración de Sole es piedra fundacional para entender de dónde viene, dónde está y hacia dónde va (con suerte llevándonos a muchos de nosotros con ella, como yo, que ya estoy a bordo, jiii)

 

De profesión Diseñadora de Interiores y Técnica en Jardinería: está claro que el diseño y la naturaleza son fundamentales para mí, ¿no?

 

 

Ahora bien, con esto en claro, vamos a adentrarnos en su pasado (un pasado que muchas niñas de los 80s teníamos en común, aunque no todas llegamos a ser la Tess McGill que Sole llegó a, al menos, vestir).

 

Soy Sole Muñoz, una taurina que de pequeña soñaba que cuando fuera grande quería ser "ejecutiva" en una multinacional, para poder ir a trabajar en americana y stilettos. Y bueno, sí, trabajé 18 años en la multinacional, era una esclava del sistema en Stilettos. Hasta que por suerte un día salí del agujero. Me encantaría decir que fue por valentía propia, pero no, por suerte fue más fácil y el mismo sistema tomó la decisión por mí (amaba ese maldito trabajo).

 

A veces el destino se cansa de esperar que despertemos y se manifiesta solo, ¿no? :p

 

La cosa es que después de tanto tiempo viviendo en automático de pronto me encontré con todo el tiempo del mundo para mí. Lejos de haber sido un momento de disfrute, en cambio fue un momento de gran crisis, y ahí fue cuando comenzó a gestarse lo que finalmente sería Lole, moda sustentable.

 

Comparto la vida con mis hijas (dos mujeres únicas, no puedo ser objetiva si hablo de ellas), marido y Rocco. Hacía ya un par de años que en casa separamos los residuos, y de generar una bolsa diaria de "basura" (ahí iba todo: restos de alimentos, botellas, servilletas, envases plásticos) pasamos a generar media bolsa cada 4 o 5 días y una inmensa bolsa con los reciclables, que llevábamos el fin de semana al punto verde.

 

¡Muchos puntos en común Soleee! Separamos basura desde hace muuucho tiempo, y en estos dos últimos años – con su génesis a la cuarentena estricta – no pude evitar notar CUÁNTA basura descartable juntamos. Yo llegué a usar mucho de todo eso con Dindu para hacer robots de cajas, conejos y zorritos de rollos de papel higiénico, y una larga lista de etcéteras muy asistida por sus maestras 2020 Vale y Noe, y en un tiempo llevé muchos sachets de leche lavados, cortados y secos a la campaña antifrío El Otro Frío (atención que la semana que viene se lanza campaña 2021). Pero hasta ahí llego yo. Sole fue por mucho más, y acá es venerada con altares llenos de velas y estampitas por haber ido mucho más allá…

 

La cosa es que en ese momento, en el que se juntaron los reciclables + mi tiempo libre, me pregunté "¿qué puedo hacer con esto?" Se sumó también mi espíritu crafter, inquieto y creativo, hay que decirlo también.  Y un día, después de que las chicas se fueran al colegio, marido a trabajar, me quedé sola en casa y con unos cuantos sachets de leche en una mano y la plancha en la otra, arranqué.

 

 

Todo fue a pura experimentación, prueba y error. Conocer las bolsas, los diferentes plásticos, cual se podía combinar con cual, que pasaba con los diferentes grosores. Y luego de obtener el material que me gustaba en cuanto a su espesor, flexibilidad, tocó definir qué producto hacer, la moldería, como coserlo, con que hilo... toda una aventura, no sabía nada del tema.

 

Todo esto fue durante el verano del 16' hasta que en marzo volví a trabajar en relación de dependencia y el proyecto quedó en pausa. Y pasaron más de dos años en pausa, y me di cuenta que tenía que retomar, pero en serio. Así fue que despacio, pero a paso firme y constante, comenzó esta segunda parte de la aventura.

 

Lo primero era darle un nombre, y Lole fue la primera y única opción. Lole soy yo de niña, así me llamaba mi abuelo Paco, que se fue pronto de este plano, pero su paso fue suficiente para dejar huella y me gustó la idea de homenajearlo así.

 

Después abrí la cuenta de Instagram, y marido se ocupó de registrar la marca y la web. Si bien trabajo sola tengo un equipo de lujo que me banca en todas: marido e hijas. Ellos siempre me alientan a más, a hacer nuevos productos, se bancan la casa llena de bolsas ¡y que trabaje hasta cualquier hora! Juntos somos el mejor equipo.

 

Lole va camino a los tres años de vida, aunque hace casi 6 que comenzó esta aventura, y en el camino sigo experimentando, algo que no pienso dejar de hacer nunca: investigando más de los plásticos, más de moldería, más de cuestionarme el uso de determinados materiales que acompañan al material principal que es mi "cuero plástico".

 

Porque todo esto surgió a partir de enfrentarme con la realidad de "basura" que no era basura. Y además de Lole surgió un estilo de vida propio, familiar, que nos interpela. Me encanta compartir con la comunidad hermosa que se fue formando en Instagram todas las vivencias personales que nos ayudan a crecer en este camino de necesidad de ser más amables con nuestro planeta, con los recursos, con el uso responsable de ellos; con el consumo responsable. Siempre con respeto. Y aprendiendo a respetar. Con la convicción de que el cuestionarse es lo que nos hace crecer, en todos los aspectos de la vida.

 

Resumido: Lole crea accesorios a través de la reutilización de bolsas plásticas de descarte. Cada accesorio es único, 100% hecho a mano de manera artesanal.

 

 

Y yo amplío un poquito más: sus accesorios son DIVINOS, súper estéticos y resistentes. Hay billeteras, totebags, midori (tamaño A6 3 cuadernillos de 24 hojas lisas Nat* cada uno), porta pasaportes, tarjeteros, y clutch (sobres)… y todo esto hasta ahora claro. Vamos a ver qué más Lole aparece cuando Sole domina (respetuosamente, claro) nuevas técnicas y materiales reciclables :) Pasen por su tienda online a conocer bien todo lo bello, bueno, práctico y noble que hace :)

 

* Paréntesis medio cualca pero no tan cualca: Mary y Facu de Tienda Superí están sorteando tres kits aluuuu de productos de papelería Ledesma NAT (hecha 100% con caña de azúcar, 0% fibra de árbol y 0% blanqueadores químicos). ¡Participen haciendo click acá!

 

Y una más. Sole no lo sabe, pero hizo algo más por mí y por todos los que estamos en este camino de hacer MÁS por el planeta, mucho más.

 

En este post muy agradecido de Instagram de Lole, Sole citó a otros fanáticos de la #BasuraCero que la impulsaron a más desafíos, que la acompañan y que admira también.  Comparto a esas personas así ustedes abren pestañas y se siguen metiendo de lleno en este maravilloso mundo del diseño, de la práctica responsable y de la concientización de esto que generamos, que todo vuelve a la tierra. Bueno. Que generemos menos. Y que vuelva menos :)   

 

 

SWAHILI

Raüni

Jauría Textil

Mueve – Tienda Sustentable

ÉKDYSIS

Tripping Argentina

Nati Mazzei de Ecointensa

Dafna Nudelman de La Loca del Tuper

Agus de Blonda Verde

 

 

Muchísimas gracias Sole por compartir tu camino y, más importante, POR TOMARLO, ANDARLO, MEJORARLO. Todos te lo agradecemos, especialmente el planeta :)

 

¡¡¡Muy ecofeliz miércoles a todos!!!

 

 
 
Lole – Moda Sustentable
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Todas las fotos de este post fueron brindadas por Lole.