Siempre dije (y
arengué con fuerzas) que mi querida amiga Romi de Corazón de Algodón tenía que ser una YouTuber: no sólo por todo lo que ama coser, diseñar y enseñar
a otros a coser (y a emprender), sobre todo porque es un personaje total.
Personaje adorable de comentarios desopilantes que además aporta contenido de
valor, ¡tomá, lo tiene todo! Para mí sería un re hit de YouTube, y ahora que
conocí mejor a su hermana Ivi, creadora de Lamarque Cuarto de Costura,
¡¡¡quiero que la familia entera sea YouTuber!!! Las Lamarque tienen una
frescura hermosa, y puntualmente estas dos son Masters del hilo y la aguja (y
la máquina). ¡Gracias Romi por chiflarme que Ivi hace los tapabocas más glam
del planeta, y con esa excusa ponerme en contacto con ella! Y gracias totales
Ivi por acompañarnos hoy, con tus pasiones, puntadas y sueños de costura….
Nunca
lo había pensado pero tal vez la que me
adentró en la costura es la mismísima Romina, que iba a una costurera cerca
de casa y yo, siendo mucho más chica que ella, la acompañaba y veía todo ese
proceso.
Creo
que todo comenzó con que mi abuela la obligo a mi mamá a ir a corte y confección
de chiquita (mi mamá quería danza) así que, como sueño frustrado de mi mamá, me
llevo a mí a danza a los 7 años (lo mejor que pudo haber hecho porque es mi mayor pasión, que no la practico más
y cada vez que lo pienso, lloro).
Así
que yo a los 16 años le pedí ir a corte
y confección, y así fue: estudié 3
años con una señora en su casa… ¡mi mamá se quería morir, debe haber sido
por un karma que termine acá jajaja, andá a saber! Ni te cuento cuando le dije
que quería estudiar Indumentaria en la UBA,
¡se arrancaba los pelos! (Es profesora de matemática, súper cuadrada para lo
artístico). Pero acá estoy, le demostré que se puede todo cuando algo te gusta.
De ver a mi mamá
en las escuelas en acción, a los 8 años le pedí un pizarrón enorme. Mis amigas
no querían venir a jugar a casa porque yo era la maestra y las obligaba a hacer
tarea. Nunca tuve paciencia para la vida misma, pero dicen que explico demasiado bien, las veces que sea necesario.
Ahora
que voy hilando… ¡es una herencia indiscutida todo esto!
Jajaja la amo,
¡amo como contó su historia! Y amo que la verdadera vocación siempre aflora, y
nunca nos suelta la mano. Ya lo verán más adelante, en el giro inesperado de
esta historia ;)
A los 19 años hice
mi propia colección de ropa para vender (duró 2 años),
también con apellido Lamarque, ¡claramente no entendía nada! Me costaba vender,
la plata que entraba me la gastaba jajaja, fue
más en forma de juego. Al mismo tiempo comencé
a estudiar y la carrera era tan pesada que no pude hacer nada más que dedicarme
a eso… te diría que hasta no podía dedicarme a la vida social ni al ocio. Y
ya en los últimos años de carrera Romi quedó embarazada y me propuso
reemplazarla en sus talleres, lo cual hice y a la vez me animé y me armé un
programa propio...
Así arranqué con los talleres de corte y confección.
Ivi da(ba)
clases presenciales en Club Atrezo,
y seguro ahí volverá cuando pase el temblor ;) Cuentan los que saben que sus
clases son lo más, que todos se van chochos con lo aprendido y cosido con sus
propias manos. Qué bueno saber que existe un lugar en el mundo donde explorar
la costura y tener un hermoso grupo de pertenencia al mismo tiempo, ¿no? :) Acá pueden leer un hermoso post sobre el espíritu de sus clases :) Y pica Pau de Zazil Ha entre sus alumnas :)
Sigamos con la
historia, que se está poniendo cada vez más buena jijijij
Me recibí el año
pasado, así que mientras doy las clases, pienso todos los días en qué quiero que se
convierta mi marca para venderles mis productos. Un día es indumentaria,
otro día es decoración, otro día son zapatos… ¡pero ya va a salir!
Y ahora saltemos
al boom del tapabocas, y la pregunta más tonta que jamás alguien le podría
haber hecho a Ivi: ¿te imaginaste alguna vez en tu vida diseñar y hacer tapabocas?
¡Obviamente
no, como nadie imaginó esta situación! De hecho
los primeros los hice para regalar, y publicar en mi cuenta de Instagram porque
siempre muestro lo que me coso.