Una luz que brilla fuerte

PLAY | Better When I'm Dancin' – Meghan Trainor

Ayer celebramos el libro “Dulce y salado hogar” de Rosario Lanusse (fotografía y dirección general) y Tania Schäfer (chef y food styling), con diseño de Lourdes García Traverso (dirección de arte); y no es casual que hoy nos sentemos en la mesa de Lulú, o Luz del Este, como todos la conocemos (y veneramos) en Instagram…

“Dulce y salado hogar” habla de la familia, de momentos compartidos con los afectos y de los sabores que elegimos para nutrirnos, bien ricos, fáciles y caseros. Si tuviera que elegir una historia para darle vida en el mundo real a este espíritu editorial tan noble, elegiría la de Lulú. De hecho, eso estoy haciendo :D Vamos, siéntense conmigo con confianza, déjense mimar por Lulú, tomen su café mientras esté caliente y acompañen su desayuno familiar con lo que quieran. Hay mucho horneado para elegir y una gran historia por escuchar…

Soy María Lourdes Ledesma 38 años. Mamá de Luz (12) Matías (10) Juan Cruz (9) Tomás (7) y José (5). Soy profesora de historia y religión, pero cuando empecé a tener tantos chicos, decidí emprender, buscar alternativas de trabajo para poder quedarme más en casa.Tuve varios emprendimientos: hice carteras, vendí ropa de niños, vendí tortas, di clases particulares… ¡ya ni me acuerdo! ¡Jajaja!

Al año de casarme, empecé a incursionar en la cocina. Veía todos los canales de cocina, y practicaba las recetas. A la par empecé a tener hijos… y muchos varones... fue ahí que dije, aprendo a cocinar, ¿o como hago para alimentar a tantos machos en casa? Aparte pensé, voy a tener a cuatro nueras, ¡qué horror! ¡Más vale que me quieran por la cocina, jajaja!

Fue ahí que decidí empezar a hacer cursos de cocina: en Gato Dumas con Calabresse, Moira Patissiere, Maru Botana, Juliana López May. Obvio me copé, por eso estudié pastelería en Gato Dumas y después estudié cocina. ¿¿¿Cómo hice??? ¡Ni idea! Lo haces…

Claro que sí, esa es la actitud: cero en preguntas, ¡diez en hacer! ¿Y cómo podrías definirte como cocinera Lu…?

Soy un tipo de cocinera muy práctica. Cocino simple y rústico. Lo que enseño en las clases son preparaciones que sé que van a volver a hacer. Trató de enseñar todos los tips y secretos para optimizar el tiempo y los productos.

Sus comienzos como emprendedora gastronómica estuvieron bien acompañados y motivados…

Como me gustan mucho las picadas, me puse un emprendimiento que lo llame Las Marías, con una íntima amiga mía, Paz. Hacíamos eventos. Siempre iba con algún hijo, o embarazada. Cuando los chicos crecieron me ayudaban ellos y me guiaron para perfeccionarme, ¡son más exigentes que yo!  Y al mismo tiempo que hacía los eventos, daba clases de cocina en mi casa.

 Repasador Sólo para Mí.

La siguiente parte se la dedico a mi querida Pali Rossi, abogada y abanderada de la protección de la marca…

¿¿¿Y la marca??? Cuando fui a registrarla, ¡obvio no podía! Las Marías… imposible.  Así que pensé muchos nombres, fueron meses y meses… no podía registrar ninguno. Lo único que sí tenía claro era el logo. El logo fue lo primero que tuve en mente. Tenía que ser un nombre que empiece con “L” por el logo, y fue ahí que decidimos ponerle Luz del Este. Luz, mi hija me acompañaba a los eventos, fue ella la que ayudó…

 Repasador estampado con bici Sólo para Mí.

Qué hermoso homenaje :) Sigamos con la historia y pasame otra medialuna porfa…

Hasta ahí todo divino... hasta que mi marido me dijo que nos íbamos por trabajo a Santiago de Chile. Estaba en uno de mis mejores momentos, pero obvio, ¡lo primero es la familia! Sabía que muchas cosas nuevas se venían. De todos modos, ya habíamos dicho con mi marido que venir a Chile significaba un año de adaptación y de no hacer nada laboral. Me acuerdo que Marina me dijo: obvio Lulú, ¡en Chile vas a dar clases de cocina! Y yo le dije: ¡estás loca…por lo menos voy a esperar un año para ponerme a hacer algo! Y acá estoy, hace ocho meses en Santiago y con dos emprendimientos: dando clases de cocina y vendiendo delantales de cocina.

Lulú, como muchas mujeres que me rodean off y online, es mi heroína. ¡Madre! ¡MADRE DE CINCO! ¡Y ADEMÁS EMPRENDE! ¡EN SANTIAGO DE CHILE! ¡CASI RECIÉN LLEGADA AL PAÍS HERMANO! ¡Lu sos lo más en serio!

No sé mucho cómo llegué a hacer todo lo que hago, pero sí sé que estoy más que inspirada y mucho aprendí en mi casa. Somos siete hermanos, y a todos nos gusta emprender. Siempre en mi casa mi mama y papa nos decían: hay que ser independientes, trabajar mucho, hacer lo que nos gusta ¡y ser felices! Con tantos hermanos trabajé de chica: cuidando chicos, animando fiestas de cumple, etc. Aparte tengo un marido divino y muy santo que me inspira, y que me acompaña siempre en todos los emprendimientos. Sin su apoyo no hubiese podido hacer nada. ¡Un SANTO! Obvio, ¡los chicos también! Son mis catadores principales y público más exigente. Mis amigas también me ayudaron mucho siempre.

Es tal cual. Detrás de cada persona que emprende hay una familia y una red de amistades de oro. Me aventuro a decir que no somos nada sin todos ellos. Y además tenemos a nuestras musas para agradecer. Lu tiene las suyas…

Mi motivación principal la recibo en casa, con mi familia, mi casa, mi hogar. Con las cosas que preparo todos los días. Dar clases de cocina, los delantales y mi familia van de la mano. Los delantales me inspiran a cocinar, a dar amor a las personas que lo van a recibir. Me encanta esperar a los chicos con algo rico, alguna sorpresa. Obvio, ¡a marido también!

  

Conozcamos en detalle las facetas creativas de una mujer todo terreno…

Lulú y Pía hacen delantales

Los delantales fue un sueño que tenía desde hace años… ¡años! Las que vivimos en la cocina queremos estar lindas y cómodas, ¡para que nos motive estar ahí, cocinando! Conocí a la persona justa. Pía, una amiga argentina que conocí en Santiago, que le copó el proyecto y se tiró a la pileta conmigo. Los delantales los empezamos a vender hace poco acá, por supuesto, con la idea de venderlos a fin de año en Argentina también. Hay que pensar siempre en grande, ¿no?

Cuando compro las telas me voy imaginando esa tela en la cocina y preparando una receta. Cuando diseñamos los delantales, tuvimos en cuenta hasta los tirones de los chicos diciendo: ¡Mamá... escuchame!

Para mí hacer delantales de cocina es una linda invitación a meternos en la cocina, a cocinar con amor a nuestros seres queridos, a reunirnos en torno a la mesa, a disfrutar de lo que hacemos con nuestras manos, salga como salga. Que motiven para la unión y el diálogo. En definitiva, estamos acá, sólo para ser felices, ¡por eso hay que hacer lo que nos guste y nos de felicidad!

Lulú da clases de cocina

Las clases de cocina son temáticas, como las que daba en Argentina. Me encanta enseñar, y amo cocinar. Pude unir, sin quererlo, muchas pasiones: enseñar, cocinar, decorar, y estar linda en la cocina. Así, cuando vuelven los chicos a las 3:30 de la tarde, estoy para ellos. 

¡Lulú además es Instagramera!

¿¿¿Redes sociales??? ¡¡Chan!! Soy malísima, pero tengo la suerte de tener una súper cuñada, que es grosa en esto, Marina de Sólo para Mí. ¡Ella es una gran fuente de inspiración emprendedora! Bueno, fue ella la que me abrió la cuenta de Facebook, la de Instagram, ¡y el blog! ¿Blog? Quedó ahí, pero ya me voy a poner las pilas con eso.

                                         Repasador estrellas y azucarera manzana Sólo para Mí.

Y acá va su testimonio que tomo como súper valioso para el que pasa por acá, lo lee, toma coraje para dejar de lado sus temores y se anima a crear algo. Lo que sea. Hay que salir a jugar chicos, ¡que la vida es hoy!

Empecé y descubrí Instagram con el juego de Marina del año pasado, #colorsoloparami. ¡¡Me copé!! Ese juego potenció y desarrolló mi creatividad, me hizo conocer un mundo que no sabía que existía, un mundo no solo dentro mío, sino el de todo Instagram. Amé conocer a tanta gente… bueno, conocer es un decir, pero esa conexión con tantas personas, esa buena onda que te transmiten es impresionante, eso me hizo crecer y creer en mí y en mis proyectos. Aprendo de tantas personas, no sé si puedo nombrarlas, ¡son todas grosas que me inspiran y motivan todos los días!

 Azucarera manzana Sólo para Mí.

Es tal cual como lo pinta Lu. La comunidad online en la que nos movemos es muy buena onda, muy inspiradora y generosa como pocas. Y lo más noble es que es abierta, te recibe cualquier día, a cualquier hora.

Me queda una pregunta más para hacerle a Lu… ¿por qué cocina para su familia, enseña en sus clases, e inclusive, aventuro yo, Instagramea?

Porque creo que es necesario volver a las raíces, a juntarnos en la cocina, a charlar mientras preparamos lo que vamos a comer. A comer ese dulce que sale de nuestras manos, fácil, rico y natural. Creo que es necesario que nos metamos más en la cocina, que dediquemos tiempo para que podamos comer mejor, y aparte invita a la unión familiar. En casa, cuando hacemos pastas, ¡ayudan todos! ¡Pero todos! Ponemos música de fondo y entre canto y baile, ¡salen las pastas! Creo que el cocinar, más que sacarte tiempo, te devuelve tantos beneficios: unión, amor, mirar a la cara a nuestros seres queridos, comunicación, paz...

No tengo nada más para agregarle a este post. Me quedo con este sabor a vida plena, a comunión y algo dulce, obvio…

Individual Sólo para Mí.

¡Muchas gracias por compartir tu admirable historia Lulú!

Luz del Este

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Todas las fotos de este post pertenecen a Luz del Este.