Happy girl, happy days

PLAY | Lucky Star – Madonna

(Para Joss, vos sabés...)

Lo primero que Nadia Flijer dice sobre sí misma es que se considera una persona afortunada porque puede vivir de lo que AMA (sic), la fotografía. Y, según dicen, de la buena fortuna se desprende la felicidad. Pues bien, al ver el objetivo de sus fotografías, yo multiplico sus ganancias anímicas sin dudarlo. ¿Cómo no vivir en un constante estado de dicha si todos ellos (+ sus felices momentos) son las instancias a retratar…?

La fotógrafa de 27 años es fanática del color violeta en todas sus tonalidades, de la música y los atardeceres. Todos sus favoritos se cuelan de alguna manera en cada una de sus fotos, capaz no literalmente pero sí en la esencia: está la vida a color, hay amor sin fronteras, romanticismo en su estado más puro y la cadencia de un buen momento que traspasa la pantalla (o el papel, en caso que la foto llegue en su estado más feliz y arcaico).

Desde chica me encanta congelar todos los momentos posibles. Mi primera cámara digital pocket la tuve a los 15 años, como regalo de cumpleaños, y desde entonces siempre, tuve una cámara de compañera de aventuras. Esa primera cámara era un ladrillo, gigante, muy pesada y sus fotos, de sólo 2 megapixeles, ¡pero me llenaban de felicidad! La tecnología fue avanzando y fui cambiando mi cámara pocket hasta que ya no fue suficiente.

En 2010 compré mi primer cámara réflex, una Canon rebel XS. Poco sabía de su funcionamiento, era mucho más de lo que estaba acostumbrada hasta ese momento, necesitaba saber más, quería usarla a su máximo potencial y la idea de estudiar fotografía digital se hacía cada vez más fuerte, cada vez más frecuente en mi mente. Se estaba despertando mi pasión.

Fue finalmente en 2011 que tome la decisión, una de las más importantes de mi vida: dejé todo de lado y me anoté en la Escuela de fotografía creativa de Andy Goldstein, y tres años después. Me recibí con el título de “Técnica en Fotografía y Fotógrafa Profesional”. Ahí aprendí todo sobre la fotografía digital, su historia y el retoque de imágenes… mucha teoría, muchos esquemas que decidí romper en búsqueda de mi propia imagen.

Fui experimentando en el tiempo distintos estilos de fotografía. Tras mucha prueba y error encontré el mío, enfocado en pequeños detalles, muy cálido y retratando amor de una forma muy natural, sin flash, aprovechando la luz del sol. Lo que más me gusta es hacer retratos, sinceros y relajados. Es un instante de conexión que queda inmortalizado, contando su historia.

Me encanta conocer a las personas, compartir el momento con ellos, alcanzar la confianza necesaria para que se suelten y puedan disfrutar el momento tanto como lo disfruto yo.

Me encanta llevar mi estilo de fotografía a momentos importantes como los eventos sociales, en especial los casamientos. Rompiendo con las clásicas fotos que podemos ver en los álbumes de nuestros padres, tíos e incluso abuelos: siempre muy similares, rígidas, despersonalizadas. Intento ser parte del evento, estar en todos lados y al mismo tiempo pasar desapercibida, buscando tomas espontáneas, naturales y sin flash siempre que la luz lo permita. Cada una de estas historias termina con un sinfín de fotos que me encantaría compartir con ustedes, para que puedan ver de lo que hablo y tal vez contagiarse un poco de esta pasión que es la fotografía.

 

Esta chica con suerte y vibra feliz contagiosa quiere que todas las familias vivan en ese estado lalala este verano. Su deseo se traduce en un 25% de descuento en sesión de fotos familiares (promo válida durante enero y febrero). 

Y atención tortolitos, que Nadia va a mover su varita camarita mágica para brindar alguna sorpresa especial para San Valentín. A este punto, creo que el santo de los enamorados debería ser el santo patrono de las Nadias del mundo, chicas apasionadas con mucho amor para retratar...

Brindo por eso :)

Nadia Flijer - Fotografía

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nadiaflijerph@hotmail.com

M: 15 4989-2165

Todas las fotos de este post son, obviamente, de Nadia Flijer.