Mientras
Estela estampa, Denise Massri es feliz. Toda su vida, desde su más tierna
infancia entre rollos de tela, operó para que ella hoy se vea manejando
colores, diseños y trabajo manual con firma personal. Y con suma felicidad. En
su tablero de la vida, éstos fueron los casilleros que fue completando…
Nací entre telas,
cintas y galones. Mi abuelo tenía una sedería (que después le quedo a mi papá)
y al lado estaba la mercería de mi tía abuela. Cuando era chica, mi papá nos
llevaba a trabajar, así que atendíamos a las clientas, cortábamos géneros y
dormíamos siestas entre rollos de tela. Tanto mi papá como mis hermanos
tuvieron varias marcas de ropa, y yo heredé el amor “por los trapos”, como se
dice en la jerga de una familia textil.
Para escaparle al
mandato familiar, me recibí en Ciencias de la Comunicación en la UBA y estudié
publicidad en la Escuela de Creativos. Trabajé como prensa de moda y en la
revista Catalogue como jefa de producto, hasta que un día se me cruzó entrar al
Teatro Colon a estudiar Caracterización Teatral para aprender maquillaje y
vestuario. Hice el curso de verano y después el ingreso a la carrera. Fui una
afortunada ¡y entré! Me recibí de caracterizadora teatral y, como era de
esperar, el vestuario apareció en mi vida. Tuve mucha suerte y pronto comencé a
trabajar en vestuario en cine, teatro y la opera. Y así fue como hace más de ocho
años que trabajo para una compañía de opera que se llama Buenos Aires Lírica.
Luego de años de asistente para muchas vestuaristas me ofrecieron ser
coordinadora de vestuario.
A la par, desarrollé
una línea de accesorios que vendí a Juana de Arco, los Vados del Isen,
Condimentos y La Mercería, entre otros. También abrí y cerré un local de ropa
mayorista en la calle Helguera en Flores, y hace poquito tiempo empecé a
estudiar serigrafía en el taller de Coti Martínez. ¡Fue amor a primera vista!
Luego de un par de meses de gestar este proyecto en mi cabeza, me animé a
desarrollar estampas propias y productos relacionados con el hogar: darle
toques felices a donde uno vive me parece fundamental.
Se
animó y no perdió tiempo. El fuego de la vocación encendió todas las máquinas
que tenía que activar para dedicarse a su pasión, con alegría y variedad lista
para compartir.
Estela estampa nació
de esa mezcla entre la herencia textil y el amor por la opera. Hace muy poco
tiempo arranqué a vender y estoy completamente sorprendida por este mundo de
diseño, que aprecia tanto lo que uno hace con sus propias manos…
Mientras
Estela estampa, Denise es feliz.
Estela Estampa
muy linda nota y trabajos de Denise! Saludos Vero!!!!
ResponderEliminarLas emprendendoras que vas presentando en el rubro textil, son todas super creativas.
ResponderEliminarCada vez me tienta mas hacer un curso de serigrafía. Es hermoso.
beso
Ire
:) da para hacerse un cursito, no? jejejje! besos chicas y gracias por pasar!
ResponderEliminarVero sos tan genia y tan generosa!!!! gracias!!!!!
ResponderEliminarQuiero todas las telas estampadas de Denise para mis fotos gastronómicas!..pero me encantaría conocer su trabajo como vestuarista lírica para fotografiar también. Tuve la suerte de trabajar durante la construcción del Teatro Argentino de la La Plata (uno de los teatros líricos más importantes de Sudamérica), fue emocionante ver como se construyó ese Teatro, y más emcionante aún cuando empezó a funionar y ver el detrás de escena: ensayos de orquesta y ballet, vestuario, zapataría, los talleres de escenografía...
ResponderEliminarVirginia gracias!!!!!! me encantaria poder hacer algo juntas! si te dan ganas escribime a estelaestampa@gmail.com y charlamos mejorcito! gracias!!!!
Eliminargracias a vos deni y qué lindo lo que contás vir! debe haber sido maravilloso!
ResponderEliminarAmo esas historias donde la vida te va llevando donde tiene que ser... divinas estampas Denise! la serigrafía me tienta tanto! veo cosas tan lindas!
ResponderEliminar