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| Zona de Promesas – Mercedes Sosa y Gustavo Cerati
Era
viernes, había sol. No hacía calor. Fue ese viernes que Buenos Aires guiñó su
ojo otoñal y estaba lindo para pasear. También estaba lindo para sentarse a
almorzar sabores intensos con una buena amiga en una vereda porteña. Y eso
hicimos con Romi en Don Charlone.
Llegué
un poco más temprano de la hora pautada. Me recibió una esquina bien de barrio,
con mesas puestas y algunas sillas de colegio y otras de madera. Aprovechando
las bondades del clima, me senté junto al ventanal de la entrada, aunque bien
podría haberme sentado adentro para admirar una puesta en escena simple y
hermosa.
Con
la llegada de la carta (muy bien diseñada) me percaté de la música. Sonaba
Mercedes Sosa, calculo que su disco “Cantora”, o por lo menos una seguidilla de
sus tracks guardados en el iTunes del Don. Entre la vista panorámica esquinera,
el verde de los árboles, las melodías del autoparlante y la vibra del viernes
más viernes de mi vida, entré en un trance totalmente terapéutico. Me desprendí
de todas las mochilas que cargaba ese día, y la relajé tanto que me costó el “¡hola!”
cuando llegó Romi al lugar.
De
a poco volví a la civilización, interactué como una persona relativamente
normal, le entré duro y parejo al pan casero con dip de calabaza y me decidí
por un sándwich de milanesa mientras Romi optó por la tarta del día. Cuando llegó nuestro pedido, entendí porque
Romi Goransky me había recomendado tanto el lugar…
¡Gracias Romi por la magia!
El
tamaño es soberbio, ideal para las que los viernes se olvidan la dieta que
empezaron el lunes. El sabor intenso estaba ahí, bien presente, en una
combinación de ingredientes básicos pero bien dispuestos dentro de un pan tostado
crujiente de lujo (en vez de mayonesa me pusieron alioli: im-per-di-ble). Y las
papas son un crack.
Los
sabores de Don Charlone cumplieron todas mis expectativas y más, pero aun así lo
que más me llevo del lugar es la atención amable como en casa, el paisaje
barrial y el estado en el que entrás cuando la Negra te asegura que, si bien
tarda en llegar, hay recompensa…
Don Charlone
doncharlone@gmail.com
D:
Charlone 101, Chacarita.
T:
2070-1663.
Sólo
efectivo.
Genial Vero! Como siempre!!
ResponderEliminarQue lindo lugar, y que rico se ve todo! Voy a ir me encantó. Necesito ese sandwich!
ResponderEliminarHay Verito! que lindo que es leerte, espero encontrarme con muchas de esas esquinas en el pròximo viaje y que el final de marzo de porte bien con el clima!!
ResponderEliminarun abrazo grande
Anabella
como me gustó tu relato Vero, bien ahí
ResponderEliminarun abrazo!
:) ojala cuando vayan les toque un día así de viernes... bon profit chicas!
ResponderEliminarme parece que me hace falta un almuerzo en Don Charlone :)
ResponderEliminarBesos Vero y que tengas un fin de semana hermosooo!!!
Romina
si leía esto al mediodía, con restos de la noche anterior como almuerzo... agarraba el auto y hacía Tigre/Chacarita en un santiamén! :)besos
ResponderEliminarromi siempre viene bien un almuerzo en don charlone ;)
ResponderEliminarvero te imagino como cupido motorizado ajajajaja! genia!
besos chicas :D
Que rico todo y que bonito, fotos muy nítidas. Gracias.
ResponderEliminarGracias Series de TV :)
ResponderEliminarBesos!