Algo importante

PLAY | Kingston Calypso – 007 Dr. No Soundtrack

Entra un mail y aparece Solcito, una vieja amiga de Boulevard se fue a explorar nuevos caminos. En su mail me contó de Alguito, un restaurante con un mensaje, un concepto, una misión. Una punta tentadora para explorar en el corazón del hermoso centro de Vicente López. Cuando quedamos y llegué, me di cuenta que ya lo había fichado y mi espacio consciente del cerebro lo había dejado esfumar entre rutinas y corridas.  

Primero hablemos del lugar. Salta a la vista: está hecho con ideas, recursos recuperados, color, calidez y coherencia. Alguito nació porque los socios Jime y Gustavo sabían que no podían cambiar el mundo pero podían hacer algo, y con algo bastaba, aunque más no fuera Alguito.

De Alguito cuelgan lámparas de frascos de vidrio hechas por Feriado Amor al Reciclado; móviles de colores elaborados con una manguera que encontraron tirada y con tapitas de todas las gaseosas del mercado; almohadones hechos por AMOR a la Americana con maestría y retazos de viejos jeans que tenían los Alguito + fueron recibiendo de una convocatoria que lanzaron al barrio; individuales hechos con sachets de leche y bolsas plásticas del súper; una estantería lograda con los famosos cajones de manzanas (responsable de albergar a todos los productos orgánicos que vende el almacén de Alguito); tejidos de crochet en varios formatos; menús hechos con decoupage y papeles de revistas; botellas viejas aprisionadas entre dos rejas para crear una separación canchera y con color; puff… ¿sigo?

Alguito ya empezó con el pie derecho y verde, apostando a la reutilización de los desperdicios, a las ideas claras y bien decoradas. El hilo de coherencia sigue con la buena onda de todos sus empleados. Que Mati de acá, Sol de allá, Feli en la cocina preparando platos con total felicidad y Jime llegando con sus hijas para almorzar, resolver, trabajar y luego seguir camino. Es una gran familia que se fue armando porque cada uno tenía un rol fundamental para cumplir ahí. Cada uno.

La hora de la verdad para un restaurante, igual, se determina en la mesa. Yo soy bastante indecisa cuando me invitan a almorzar, así que dejé la pelota en la cancha de Sol y ella me devolvió un golazo llamado lassi de Mango, una especie de licuado con yogurt y mango TAN refrescante que me hizo conocer otra cara a la fruta tropical. Adictivo.

Para almorzar, me sirvieron una espectacular ensalada de salmón con bocconcini, verdes y avellanas (creo) o algo así.  Fresca, suculenta y sabrosa, las tres palabras que avalan cualquier plato.

Entre charlas sobre Alguito, F5 de nuestras vidas y la millonada de fotos que saqué, se pasó el mediodía y se asentó una nueva alegría: la de saber que sigo encontrando personas que quieren hacer Alguito por el mundo.    

Alguito, Espacio Consciente

http://www.facebook.com/AlguitoEspacioConsciente

alguitoespacioconciente@gmail.com

D: Tapiales 1185, Vicente López.

M: 15 6099-2505

H: Lunes a viernes de 8 a 20hs. Sábados de 9:30 a 20hs. Domingos 10 a 17hs.

Muchísimas más fotos de Alguito, acá.  

Feriado Amor al Reciclado

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AMOR a la Americana

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