Muy bien. Estamos bien estoqueados de platos, cuencos, copetineros y otras Cosas Hermosas y no tenemos con qué llenarlas. Pero no hay problema, vemos a La Catalina sentada bajo un laurel, mirando la frescura de las aguas al caer… Vamos a ponerla a cocinar, que tenemos hambre y sabemos que ella nos puede hacer un verdadero festín orgánico, integral y natural. (Esta intro va dedicada a mi papá que siempre me pedía que le cantara La Catalina. ¡Groso Bigotes!).
La Catalina es la apuesta a una vida más sana, rica y en familia de Pablo y Alejandra (Pepita para sus amigas bloggeras). Querían pasar más tiempo juntos y que él pudiera compartir más horas con Valen, de tres años y medio. ¿Qué podían hacer juntos? Si tomamos que Pablo es chef y pastelero, y que Pepita tuvo la gran C hace dos años (que la llevó a replantearse su alimentación, entre otras cosas), tenemos la solución perfecta: cocina hecha en casa por una familia unida y bien informada. Porque comer tres ensaladitas por día no te hacen vegetariano. Nope, hay que informarse.
“Nos hicimos en principio vegetarianos, para luego dejar también la leche y todo derivado de animales para ser veganos. Comenzó como una dieta sana, para luego, querer transmitir a nuestro hijo el tema de no hacer daño a otros animales para alimentarnos”. Pablo empezó a hacer cursos de cocina natural y luego se animó a probar recetas propias. “Así nace La Catalina, con mucho amor hacia la naturaleza, hacia el cuidar la tierra (usamos productos orgánicos, sin agregado de pesticidas), y claro, hacia el cuidado y respeto de los animales”, cierra Pepita.
Cuando La Catalina no está mirando las frescuras de las aguas al caer, prepara comidas para el almuerzo y la cena, amasando panificados 100% integrales y orgánicos (panes, panes con semillas, otros rellenos con nueves, almendras o castañas de cajú, brownies sin leche, medialunas solas o con chips de cacao amargo…). Hay tartas, empanadas y viandas para la oficina. Y siempre hay un poco más, que La Catalina informa vía mail a sus amigos o publica en su blog. No se pierdan el menú estable publicado en la barra derecha, con precios y todo.
Todo este amor y dedicación en familia materializa propuestas que van directo a sus casas u oficinas, para que el paladar sea el que cuente el final feliz y saludable.
La Catalina
http://lacatalinaricoysano.blogspot.com
lacatalinatodoricoysano@gmail.com
M: 15 5260-1323 y 15 4565-6898
Fotos del post: algunas de Perica, otras de Danila y otras de La Catalina.
Hola Vero, me encantó el post, hoy La Catalina está por todos lados! Beso grande, buen día, M.
ResponderEliminarque buenisima onda! todos ayudandonos entre todos, y ademas comiendo cosas RIQUISIMAS. Doy fé del amor y de lo rico que son las cosas de La Catalina!
ResponderEliminarel pannnn, el PANNNNNN!!!
ahhh bueno doblete!!!! NO DEJEN DE PROBAR EL PAN DE LA CATALINA.
ResponderEliminarGROSSO. PERFECTO.RICO.BUENISIMO.
CON CASANCREM Y MIEL MI PREFERIDO!!!
Chicas si siguen convidando cosas tan ricas para el verano voy a rodaaaaarrrr, jajaja, riquisimoo
ResponderEliminarbeso.Nadine
Muchas gracias Vero y muchas gracias chicas por sus comentarios!!!
ResponderEliminarEl pan, las empanadas de quinoa, las tartas de brocoli, las pepas son riquísimos y sin haber probado todavía el resto me animo a decir que también.
ResponderEliminarMi familia sobrevive a mi comida, pero cuando mi mamá salió del hospital después de una operación complicada y vino a casa por unos días hasta terminar de recuperarse me salvó la Catalina con su delivery de urgencia para llenar el freezer de cosas ricas, sanas y sin sal pero con gusto!
qué ricuras!
ResponderEliminaryo de chiquita era insoportable con La Catalina, la cantaba todo el tiempo (al menos así me lo recuerda mi familia), jajaja