Romi siempre tiene algo rico para convidarte cuando te recibe en su casa. Y no estamos hablando solamente de una buena picada, que siempre compra panzas comilonas; hablo de platos investigados online y elaborados con amor, idea y un concepto detrás. ¿Querés una cena jamaiquina completa, con comida y tragos? Pues bien, ella te la hace, de punta a punta. Y para la sobremesa, propone juegos en sintonía con el tema de la noche. Ella piensa, Google provee. Romi es así: divertida, ingeniosa, curiosa al extremo y súper servicial (más allá de ser una excelente amiga, claro está).
¿Y cómo se beneficia el lector de Alma con este post y una Romi tan gourmet? Con Une bonne fourchette [Un buen tenedor], su blog de recetas favoritas. Lean esta lista después de haber desayunado suculento: calzone de puerro, cebolla morada y cuatro quesos, flan, budín de limón, sopa paraguaya, quiche Lorraine, irish sweet chicken, el milenario Irish Stew (nota al pie: Romi desciende de irlandeses, por eso su constante búsqueda de raíces culinarias) y tantas otras mixturas de ingredientes, tiempos de cocción y formas de presentación.
Su proceso de descubrir su cocina y la forma que le permite expresarse es este blog, que agradezco tanto porque habla en criollo y bien claro. Hasta tiene recetas básicas para que podamos hacer salsa filetto casera, guacamole, ensalada coleslaw (muy popular en Irlanda) y un cosmopolitan bien a lo Carrie, con stilettos, risas y buenos cuentos.
Para los que, como ella, quieran acercarse más a la cocina y sus ceremonias (terapéuticas, si me preguntan…), este blog es un genial primer paso. Prueben la selección de recetas que encontró Romi, enchastren su cocina, cómprense utensilios para vestirla y delantales para vestirse, encuentren viejos platos en casa paterna y llévenselos sin que mamá se de cuenta, inviten a sus amigos a comer, hagan una cena de domingo en la cama para su chico o chica, guarden sus platos preferidos en un recetario como, ponele, el de Lou y estén seguros que la vida es mucho, pero mucho más amable cuando le dedicamos un tiempo al placer de cocinar y convidar. Sino pregúntele a Romi, ella les puede contar…
Une bonne fourchette
http://misrecetasmuyricas.blogspot.com/
Todo lo que decís sobre los efectos de cocinar... son verdad verdadera!
ResponderEliminarSalú!
Ana
sí... sobre todo que cocinar es terapéutico jajajaajajajaj! salú ana :)
ResponderEliminaraguante cocinar, es un placer y un acto de amor cuando lo haces para los demas, besos!
ResponderEliminarqué bueno para incursionar en la cocina... que tanto me cuesta! jaja
ResponderEliminarBesote, buen miercoles pegajoso!
Gracias Verito. Ya me hice seguidora de Romi y en estos días pruebo la receta de calzón con puerros y quesos que propone... Ay, cada día me gusta más cocinar (y ni hablar, comer). Que tengan un gran miércoles!!!
ResponderEliminarRecién me estoy animando a cocinar, pero todo el enchastre, el esfuerzo vale la pena cuando mi chico sonríe y valora el amor que le pongo a nuestras cenas!
ResponderEliminarhola! soy de los que piensan que degustar es terapeutico... :P
ResponderEliminarbien por los que cocinan!!!
hay dios que post terrible a esta hora! Buenísimo el blog de tu amiga, ya lo estoy siguiendo!
ResponderEliminarBesote a vos! grandeeeee!!!!
J
Que rico!!!!!!!!! Admiro a quien tiene la paciencia de cocinar. Mi talento alcanza para disfrutar la comida, pero para preparla soy de madera! Sólo mi hijo obra el milagro de que me ponga las pilas con las ollas (gracias al grande de mi esposo me alimento, a él le voy a pasar este genial blog!)
ResponderEliminarVero me encantó tu "La Vie en Rose: Dublin by Vero Mariani" Me diste muchas ganas de conocer!!!
ResponderEliminarComo siempre, sos una genia escribiendo!!
Besos
ya me lo anotè para consultar este blog cuando se me acaba mi inspiraciòn! gracias por la creatividad de las creativas!!!!! ;D
ResponderEliminar