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El sábado podría haber sido un sábado cualquiera, pero no: fue fantástico. Fue un 1ero de mayo con aires veraniegos, clima distendido y momentos de confortable cotidianeidad en casa (exprimir naranjas, desayunar en pijamas, lavar y colgar la ropa, y escuchar música a todo trapo nunca fue tan mejor recibido).
Este feeling estival me acompañó en mi viaje en el 59 -junto al soundtrack de 500 Days Of Summer- con destino al microcentro, ese mismo microcentro que me ve transitar frenéticamente de lunes a viernes pero que esta vez sostuvo mi calma regalándome un panorama casi dormido. Bue… se dio alguna que otra marchita revoltosa pero no hubo mayor movimiento que eso.
El movimiento se produjo media hora después de bajarme del bondi, cuando me senté en la puerta de un edificio antiguo sobre Cerrito a esperar a María, de Casa Chaucha. Boluda, vas a escribir una nota para Casa Chaucha…
De ese iluminado pensamiento se desprendió un hilo de sucesos que más o menos recuerdo así: reencontrarme con María, chit chat breve y alegre de chicas, conocer a Flavio (dueño de casa) y a su enérgico leoncito dorado marca caniche toy, entrar en un hogar absolutamente fantástico y romántico al extremo, conocer a Joaquín, su amigo y compañero de laburo, descubrir que ambos son diseñadores de Kosiuko (¡ME SIENTO CARRIE FUCKING BRADSHAW!), escuchar la historia de Flavio y su chauchesco hogar, tomar notas desesperadas en mi cuaderno para no perderme ni un solo detalle de esta crónica, recorrer cada rincón y encontrar respuestas a todas mis preguntas estetas, ver como María prepara su trípode y comienza a operar su magia fotográfica mientras los chicos y yo tomamos el té con galletitas y charlamos de viajes, amores y proyectos…
Fueron un poco más de dos horas suspendidas en un estado ideal de belleza visual, charlas divertidas y gente talentosa que disfruta lo que hace y vive para hacer de su mundo un lugar más lindo y mejor. ¿Qué más puedo pedir para un sábado fantástico?
Ah sí… puedo forzar un poquito mi suerte y cerrar el fin de semana con una participación como redactora invitada en Casa Chaucha, hito que define un antes y un después en mi carrera de redactora. Aquí la nota y acá mi más profundo agradecimiento a María por creer en mí y darme este increíble lugar, a Flavio por abrirme las puertas de su deliciosa casa, a Joaco por responder con precisión todas mis preguntas sobre los conciertos de Madonna y a
Casa Chaucha
http://www.casachaucha.com.ar/
Lo nuestro es un ping pong de agradecimientos.
ResponderEliminarGracias, entonces, por haber aceptado formar parte con la buenísima onda que te caracteriza. Pero además (y no es poco) por ese plano sumamente favorecedor de mi parte trasera.
wow! quiero ver esa casa, me salio toda la cholulez de adentro...
ResponderEliminarbien ahi vero colaborando! bah, como siempre.
besos
Bien por esa colaboración en Casa Chaucha!!! :o)
ResponderEliminarMe quedé maravillada con esa casa!!!
muy bien el uso del trípooooooode!!!!
ResponderEliminarjajajjaajajaj mary of the shire sos lo más!
ResponderEliminarari, esa casa es lo más! flavio debería hacer visitas guiada con té como cierre.
y gracias andreeeeee :)
diego aparecisteeeeeeeeeeeeeeeee aajajaj!
ResponderEliminarla música de 500 days of summer es lo mas! que buen sábado! ya me voy a leer la nota en "Casa Chaucha", por las fotos que vi, creo que me va a gustar mucho esa casa...
ResponderEliminarBesotes.
que equiopete de trabajo dios mio. bueno pero basta de trabajar, vamos a festejar!!!
ResponderEliminarpd: que buen culo tiene mery!!!!